Ha pasado ya el ecuador de la liga Adecco Plata
y hemos querido estar con los entrenadores de los equipos vascos para calibrar
sus sensaciones. El primero de la lista es Txus
Brizuela. El último en llegar a la liga, para hacerse cargo de un equipo
que pocos esperaban ver tan abajo en la clasificación. Y es que se puede decir
que el Araberri está siendo la decepción de la temporada, con
únicamente dos victorias y sin saber qué es ganar en casa. “Está muy claro que el equipo no ha estado a
la altura de lo que exige la competición. Hasta el momento no ha sido capaz de
ganar ni un partido en casa y la clasificación lo dice todo, somos colistas y
cada vez la diferencia con los que nos preceden se hace mayor” dice el
nuevo inquilino del banquillo alavés.
A Brizuela muchos lo conocerán por su etapa de
jugador, o como tertuliano en Radio Vitoria. Lo cierto es que no entrenaba a
tan alto nivel desde que fuera el responsable de aquel Urbina-Malzaga que disputó la liga EBA. Ahora le toca un toro
difícil de lidiar con un objetivo claro: “El
objetivo es tratar de salir del pozo del descenso. No hay otra. No está fácil,
pero estamos a tiempo si creemos en nuestras opciones y lo hacemos todos juntos
en bien del equipo”.
El calendario no les ha acompañado últimamente,
y es que el Araberri ha tenido que medirse a los primeros clasificados. “Caceres me ha parecido un gran equipo y
Castellón, con un baloncesto distinto, igualmente.” En una liga en la que los a priori favoritos
no están fallando es muy importante no descolgarte y eso es lo que buscarán los
vitorianos, sobre todo intentando ganar los partidos que tienen ahora contra
los rivales directos. Brizuela lo sabe y ya intenta dar su toque al equipo: “En líneas generales el equipo está un punto
por debajo de ritmo de los demás equipos. Ahí es donde nos tratamos de centrar,
en mejorar nuestra intensidad en el juego, ser un equipo con más ritmo y más
dinámico, ser más constantes en ese ritmo para llegar a los 40’ con opciones.
Es evidentemente que la mejora es amplia, pero también lo es la urgencia por
hacerlo, porque quedan sólo 10 partidos y hay que empezar a ganar”.
Ganar, ganar y seguir ganando. No le queda otra
al Araberri si no quiere perder la categoría. Plantilla como para poder hacerlo
tiene, ahora solo le falta que también la suerte le acompañe un poquito.
No es bonito tener que luchar en verano en los
despachos por algo que no se ha ganado en la cancha. No sería la primera vez, y
seguramente no será la última, pero eso hace perder en cierta medida un poco de
credibilidad a las competiciones FEB. Como dice Txus: “Todo el mundo dice que hay que dar una vuelta a las competiciones FEB,
pero es en realidad el basket el que necesita una estabilidad en sus competiciones
y abandonar las dudas que todas ellas sufren. Que se estabilicen los modelos y
se pueda tener un futuro en el que los clubes encuentren su sitio en las
mismas. Evidentemente el aspecto económico es el que condiciona todo esto”.
Suerte eta eskerrik asko Txus!
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