SOÑAR ES BONITO

Resulta difícil en el deporte profesional encontrarse con sorpresas. Pocas veces los equipos “grandes” (exceptuando a los vikingos) se dejan sorprender a lo largo de la competición. El guión de esta película llamada ACB pocas veces se altera y cuando esto sucede…….¡¡qué subidón colega!! La temporada pasada fue el Baskonia. Esta el “Athletic” de Miribilla. El basket de élite en el País Vasco está en auge.

Tanto Baskonia, la temporada pasada, como Bizkaia Bilbao Basket han tenido un denominador común en su buena marcha ligera: su descomunal trabajo defensivo. Los de Fotis han centrado la base de su éxito en una fe ciega en esa faceta tan menospreciada en el ámbito profesional.

Inexplicablemente, en la ACB se ha identificado el espectáculo con la cantidad de puntos que puedes anotar. Siempre he tenido la sensación de que existe un pacto entre los equipos para no apretar demasiado y facilitar que el contrario la meta. Nos fijamos demasiado en la aburrida NBA  y nos olvidamos que el nivel técnico y físico de los jugadores está a años luz de los americanos.

Los bilbaínos han hecho un arte de esa faceta del juego y han demostrado que la defensa es un producto que puede tener cabida en la ACB. La serie contra los merengues ha sido un auténtico máster y la clave fundamental para meterse en la final.

Katsikaris ha desarrollado un grandísimo trabajo. Ha conseguido confeccionar una plantilla con talento y que además tiene una capacidad de sufrimiento increíble. El segundo partido en la Caja Mágica y los dos de Miribilla han sido los tres mejores encuentros que he podido presenciar esta temporada. Sufrimiento y fe en el trabajo han sido las claves. Un grupo de deportistas que han tirado de orgullo para hacer realidad un sueño en el que pocos confiaban. Pocas veces un sexto clasificado en la liga regular ha llegado hasta la gran final.

A mí me han ganado y pienso tragarme los 5 partidos (apostar por sólo tres me parecería una falta de respeto hacia el Barcelona) de la final. Deseo fervientemente que sigan haciendo historia y que pongan al Barça contra las cuerdas.

No me gusta el Athletic. Tampoco me caen muy bien los bilbaínos………pero los “Miribilla Bad Boys” son la oxtia. Hacen el basket que a mí me gusta y quiero que ganen la liga ACB.

Sólo pensar en la cara que se le quedaría a Navarro y a Pascual……perder por segundo año consecutivo……y con otro equipo vasco…….¡¡Dios!!.....¡¡estoy teniendo una erección!!

Soñar es bonito y, todavía, no cuesta dinero........

Habrá que aprovechar!!!!!!