TABIRAKO SIGUE FIRME EN 1ª FEMENINA

El domingo volví a Durango para presenciar un duelo de altos vuelos entre las locales del Tabi y Ardoi. El partido no me defraudó y volví a casa satisfecho de mi elección. Hacía tiempo que no presenciaba un 1ª Femenina y el partido prometía, ambos se jugaban la cuarta plaza en la última jornada de la primera vuelta. Las navarras no pudieron superar a las locales que hicieron un periodo extra perfecto, a Ardoi se le hizo demasiado largo/duro el partido y llegaron fundidas mentalmente.

Ambos equipos se lanzaron a un trabajo defensivo brutal desde el salto inicial, los dos tenían claro que el que mejor lo hiciera en esa faceta del juego tendría recompensa. Subir el balón exigía un esfuerzo terrible para los bases, se percibía que el equipo con mejor condición física (o mayor fuerza mental) tendría una parte importante del partido ganado. En ataque las navarras hicieron gala de más paciencia y buscaron sus tiros cerca del aro donde eran superiores. Por el contrario, las locales buscaron resoluciones rápidas a sus situaciones de ataque, dos o tres pases y al aro, pero los errores no forzados fueron un lastre para ellas en este primer acto. Ardoi se llevó el parcial por 11-13.

El segundo cuarto siguió en la misma línea en la faceta defensiva y ambos equipo siguieron trabajando con muchísima intensidad. La lucha por la hegemonía en el rebote adquirió protagonismo en este acto y se postuló como otro detalle clave para hacerse con la victoria, Tabirako se mostró más aplicado en esta faceta. En ataque las navarras mantuvieron la misma filosofía y buscaron a sus torres en la pintura, pero ya no les resultaba tan fácil abastecerles de balones, lo que si hicieron muy bien es rentabilizar sus tiros. Las locales se tomaron con más calma los ataques, movieron con paciencia el balón y buscaron sus tiros, pero no estuvieron muy acertadas. Victoria por 14-10 y +2 camino de los vestuarios, dos cuartos de muchísimo desgaste los que habíamos presenciado.

Las locales salieron muy enchufadas del vestuario y redoblaron sus esfuerzos en defensa, el espíritu de Ardoi se había despistado y se quedó en el vestuario. Las navarras bajaron sus revoluciones en la faceta defensiva y el partido se les puso cuesta arriba. Ofensivamente sólo era capaz de anotar en segundas opciones y desde el tiro libre, desde el perímetro absolutamente negadas acorde a una mala selección de tiro. Mucho espesor que provocó la desesperación de su técnico que se vio obligado a pedir un tiempo muerto y reorganizar su estilo de juego. Dio sus frutos y la defensa zonal bloqueó a Tabirako que se atascó y perdió el control absoluto del partido, en defensa perdió empuje y vio como, sus rivales,  recuperaban el acierto ofensivo y tomaban el mando del marcador. Las dos últimas defensas culminadas con dos buenos ataques permitió a las de Durango empatar a 14 el tercer cuarto y seguir por delante en el electrónico.

Las defensas de ambos equipos se mantuvieron firmes en el último cuarto y provocaron una sequía total en lo que a anotación se refiere (4-6). Los espectadores pudimos disfrutar de dos equipos entregados atrás pero no nos recompensaron con puntos. Ardoi tan sólo pudo anotar en la pintura y Tabi en carrera. Las de Durango tuvieron la última posesión para ganar el partido pero no lo consiguieron y al periodo extra. La fatiga de ambos equipos era tan grande que vivieron 10 minutos de bloqueo ofensivo. ¿Quién sería capaz de sobreponerse al cansacio?

Las locales tiraron de raza para afrontar el periodo adicional y llevarse la victoria. Rentabilizaron sus primeras 4 acciones ofensivas y abrió una brecha definitiva en el marcador. Las navarras estaban exhaustas y su marcador se quedó en 43 hasta el minuto 3. Demasiada ventaja en un partido tan igualado. Las locales gestionaron muy bien los últimos dos minutos y sumó una trabajada victoria por 56-50 (13-7 de parcial)

Durango me está obsequiando con un baloncesto que me gusta mucho.

Su filosofía de baloncesto obrero, no exento de calidad, me apasiona.

Un pueblo de raza.