UN AUTÉNTICO FIESTÓN

El Sustrai cerró la temporada en Zubikoa el sábado pasado. El Fundación Baskonia no pudo con los “txantxikus” que dieron un recital de buen juego y ganas. A pesar de que se mantuvieron en el partido durante los cuarenta minutos, los alaveses no pudieron sacar nada productivo de su visita a Oñate. El Aloña suma su tercera temporada consecutiva sin perder un partido en su feudo. Un auténtico record.

Con el ascenso matemático conseguido la jornada pasada, el último partido en casa sirvió para organizar una serie de eventos conmemorativos. La directiva del Aloña no reparó en gastos, como se suele decir. Agradecer al público su entrega al proyecto deportivo fue su principal objetivo. Música (pincha incluido), sorteos…………….. El encuentro fue retransmitido por Oñati Irratia y todos los medios de comunicación locales estuvieron presentes. Nadie se lo quiso perder.

El equipo salió motivadísimo al campo y rápidamente se pusieron al frente  del marcador. Baskonia demostraba poca vocación defensiva y eso, no te lo puedes permitir si quieres ganar al Sustrai. En ataque renunciaron en muchas ocasiones a correr para jugar en estático. La ausencia de Buesa proporcionó una gran superioridad a los locales en la pintura y lo aprovecharon.

Pero el sábado todo el Sustrai quería dar lo mejor de sí mismos. Los “secundarios” esta vez sí asumieron responsabilidades y se mostraron muy acertados en todas sus acciones. En defensa estuvieron al límite y en ataque la metieron. Los tres baluartes del equipo estuvieron en su salsa y consiguieron desquiciar a Baskonia, que no encontraba la manera de parar sus acometidas. Iki y Mallabi dieron lecciones en la pintura a los becados y Gamarra desde el triple.

Xabi movió el banquillo constantemente. Posibilitó a todos sus jugadores disfrutar del sensacional ambiente que reinó en el pabellón. Los aficionados se entregaron a su equipo y a la fiesta desde el salto inicial. Aplaudieron todas las acciones positivas y animaron a tope cuando el equipo se atascaba. A la conclusión del encuentro brindó una larga ovación a sus chicos. No es para menos la gesta que han conseguido.

Personalmente me ha agradado mucho poder verles jugar. Han conseguido que en Oñate se respire basket y eso siempre es de agradecer. Además han hecho un baloncesto muy agradable de ver. Del que engancha.

Me gustaría verles jugar en Eba la próxima temporada. Creo que sería un colofón brillante para estos tres jugadores. Acabar su carrera deportiva en una categoría a la que han ascendido dos veces por méritos deportivos y que no han podido saborear por motivos económicos.

Quizás sea el momento de hablar de un Proyecto Comarcal. Quizás el basket de la Comarca del Alto Deba tendría que empezar a diseñar un plan estratégico, un plan que nos posibilite estar en la pirámide del baloncesto gipuzkoano.

Pero mucho me temo que no será así.

Ojalá me equivoque.