La
primera semifinal de Infantil Femenino de Rendimiento se la adjudicó Araski sin
demasiados apuros. Araba pagó caro su fría entrada en el partido y apenas opuso
resistencia, tan sólo en el segundo y último cuarto estuvieron a la altura del
compromiso. La intensidad defensiva de las verdes y su acierto ofensivo fueron
incontestables.
Las
entrenadas por Pereda aguantaron el tipo hasta el minuto cinco del primer
cuarto, el posicionamiento defensivo fue bueno, en el que Araski comenzó a
rentabilizar su verticalidad ofensiva. Cuando la defensa de Araba se descompuso
aprovecharon para abrir una brecha importantísima en el marcador, la defensa
zonal les permitió asegurar su rebote y castigar el mal balance defensivo de
sus rivales con rápidas transiciones. El 21-9 de parcial dejó claro que las
rojiblancas se habían marchado del partido.
El
segundo cuarto estuvo mucho más igualado en casi todas las facetas del juego.
Las rotaciones de Araba conseguían equilibrar su defensa y en ataque redujeron,
considerablemente, el número de errores no forzados. Araski bajó su ritmo
defensivo, las segundas unidades se lo tomaron con más calma. Ofensivamente
trató de seguir corriendo pero el buen balance defensivo de sus rivales las obligó
al juego en estático. Buen cuarto de Araba que a pesar de perder el parcial,
15-13, por lo menos se habían puesto a competir y demostraron que tienen
basket. 36-22 para Araski al descanso.
Pero
las buenas sensaciones con las que habían terminado el segundo cuarto
desaparecieron en la reanudación. Araba volvió a cometer infinitos errores en
los pases y, además, ofensivamente cayeron en la precipitación. La selección de
tiro fue mala y además no cargaron el rebote, lo que propició que las de Pérez
se hicieran nuevamente con el control total del partido. Les bastó posicionarse
bien en defensa y buscar una buena selección de tiro para adjudicarse el tercer
parcial por 16-6.
Con el
partido ya resuelto los dos equipos se relajaron. Araski siguió manteniendo un
aceptable nivel defensivo. Pero en ataque perdió el equilibrio que había
mantenido en cuartos anteriores. Araba en la misma línea, lo pelearon hasta el
final pero el partido se les hizo muy largo. 12-11 de parcial, significativo de
que al partido le podíamos haber quitado el último acto y no hubiera pasado
nada.
Demasiado
desigual la primera semifinal.
Araski
demostró mucho más fondo de armario y más intensidad defensiva que Araba.
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