El doble enfrentamiento de Liga Vasca entre Iraurgi
y Baskonia
fue para los Azpeitia/Azkoitia, demostraron echarle más ganas y tener las cosas
bastante más claras que los visitantes. Amparados en un enorme trabajo
defensivo y con una motivación propia de las grandes batallas deportivas, los
de Iraurgi dejaron claro que pueden ganar a cualquiera, aunque te superen en
tamaño y calidad, demostraron que vestir la camiseta de un ACB no es sinónimo
de ser superiores. Los alaveses no estuvieron a la altura de lo que esperaba de
ellos.
Glual afrontaba un fin de semana
interesante a nivel de clasificación, sumar una victoria ante Baskonia le podía
afianzar en el primer puesto de la clasificación y saltaron al campo con esa
idea in mente. Pero los comienzos del
encuentro no fueron precisamente buenos, la agresividad defensiva alavesa condicionó
la puesta en escena de Iraurgi que entregó el control del juego y hasta casi el
final de este periodo no pudo jugar de igual a igual. Baskonia no se mostraba
muy acertado en ataque y no rentabilizaban la intimidación defensiva, no supo
aprovechar el respeto con el que saltaron los locales al campo para abrir un
hueco importante en el marcador. 9-13 de parcial favorable para los alaveses,
pero los de Arruti empezaban a desperezarse y a enseñar sus argumentos.
El segundo cuarto fue la explosión de los locales en
el partido. Se centraron en el trabajo defensivo y subieron la intensidad hasta
el infinito, a pesar de la clara inferioridad física se hicieron con el control
absoluto del rebote y su defensa de las líneas de pase fue impecable, los
baskonistas sufrieron para meter balones a sus interiores. En ataque supieron
aprovechar el deficiente trabajo defensivo y, con mucha paciencia, buscaron
anotar cerca del aro castigando la falta de ayudas de los visitantes.
Rentabilizaron a tope los 1x1, le habían metido una marcha más al partido y Baskonia
seguía en primera. Otra de las claves para el 24-11 favorable fue el buen
rendimiento de las rotaciones, las locales funcionaron mientras que las
visitantes no sintonizaban.
Tras el descanso las cosas se equilibraron en
defensa. Glual mantenía su línea de trabajo defensivo y Baskonia se puso a
trabajar conscientes de que sin aplicarse en esa faceta las posibilidades de
victoria serían pocas. Pero la pólvora de los alaveses estaba mojada y no
encontraron premio en sus acciones ofensivas, mientras que los locales seguían
anotando en los ataques en estático. El espíritu de trabajo alavés se fue
disipando, volvieron las ausencias de ayudas y perdieron nuevamente el control
del rebote. Además los locales también empezaron a enchufar desde el triple y
se hicieron grandes, muy grandes en el campo, tan grandes que volvieron a
llevarse con facilidad el parcial del tercer periodo por 20-11.
En el último cuarto Iraurgi aguantó el tirón inicial
de los alaveses que se lanzaron a la desesperada en busca de la victoria, se
mantuvieron firmes en defensa paliando la ausencia de anotación con trabajo
atrás. Pero se veía que Baskonia no sería capaz de remontadas heroicas, se
volvieron a enredar en la tela de araña de los azpeitiarras que acabaron el
partido disfrutando y dejando claro que saben gestionar a la perfección las
posesiones cuando el marcador es favorable. 11-16 para los visitantes, poco
consuelo cuando pierdes con un equipo que te ha dado un repaso en toda regla.
Decepcionado con los visitantes. Me esperaba ver un
equipo ambicioso y con ganas de demostrar que son los mejores jugadores
alaveses, pero me encontré un equipo bastante cómodo y con pocas ganas de
currar en defensa.
Gratamente sorprendido con los locales. Grandísima
actitud en todas las facetas del juego y muchísima jeta, la que hace falta para
jugar de igual a igual a los “grandes”, jeta que les permite
liderar la clasificación en solitario.
Un buen comienzo de mañana.
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