HUEVOS 2 - ESTILISMO SIN TRABAJO 0 (II)

Con la euforia de la primera victoria sobre el júnior baskonista le tocó el turno al Zaher, desde luego no era una tarea fácil pero sacaron casta y fueron capaces de tener todo el partido controlado. Baskonia se atascó en ataque y no supo atacar la zona impuesta por el míster local, además su trabajo defensivo fue muy deficiente y tan sólo en los últimos minutos del partido se puso a trabajar. Pero en esto del basket, pocas veces tienes premio cuando trabajas solamente ocho minutos, menos si lo haces contra un equipo del perfil de Iraurgi.

El comienzo de los alaveses fue muy fuerte marcando un nivel defensivo brutal y con un dominio del rebote pleno. Esta intensidad le permitió anotar en superioridad casi todos sus ataques, las recuperaciones fueron constantes y parecía que le iba a hacer un “roto” a Zaher nada más empezar. Pero los locales se enchufaron al partido y lo volvieron loco con transiciones desenfrenadas y con acciones individuales rápidas. Un estilo arriesgado pero que si tiene el premio de anotar (como lo tuvo) pues también vale. Baskonia quiso jugar a lo mismo pero no gozó de la misma fortuna, además abandonaron por completo el trabajo defensivo y ello provocó un cabreo monumental de su míster. Empate a 17 en el primer cuarto y los locales comenzando a creer en sus posibilidades de victoria.

El segundo cuarto fue claramente para Iraurgi. El equipo se centró en el trabajo defensivo ajustando muy bien la defensa zonal y, como consecuencia, pasó a controlar su rebote defensivo. Continuó con su apuesta por el juego ofensivo rápido y siguió gozando de unos buenísimos porcentajes de anotación. 11-1 de parcial en los cinco primeros minutos que dejaba a Baskonia al borde del KO. Un tiempo muerto serenó el maltrecho espíritu visitante y consiguieron focalizar un poco en trabajo defensivo. Las rotaciones de Iraurgi no daban el rendimiento deseado, los visitantes reducían ventajas y parecían hacerse con las riendas del partido, pero en cuanto los locales recuperaron sus sitios en la defensa zonal se volvieron a perder. 15-9 de parcial favorable a los gipuzkoanos y la cara de los alaveses un poema.

Tras el descanso las cosas siguieron igual. Zaher seguía imponiendo su juego y alargó la distancia en el electrónico hasta los 12 puntos. Los alaveses reaccionaron gracias a una mejora importante de sus porcentajes de anotación y recortaron la ventaja hasta los tres puntos, pero el sábado Baskonia era incapaz de darle continuidad a nada. Se volvieron a enredar en el juego frenético de los locales y vieron como sus imprecisiones fueron castigadas duramente, los gipuzkoanos se volvían a distanciar y acababan el cuarto con un control del juego insultante. 27-18 favorable y el partido muy encarrilado.

En el último acto Iraurgi sigue aumentando la brecha en el marcador, la zona daba sus frutos y el bloqueo de los alaveses era total a la hora de atacarla. Incapaces de cargar el juego interior donde eran terriblemente superiores y con una circulación lenta y tediosa fueron incapaces de desajustar el posicionamiento defensivo local. El partido se rompe definitivamente con Zaher crecido a tope. Pero milagrosamente los baskonistas aterrizaron en Azkoitia y se lanzaron a una defensa desesperada que tuvo sus frutos, a falta de un minuto se pusieron a 4 y con opciones de poder llevarse una inesperada victoria. Tres errores defensivos (castigados con tiros libres) tiraron por tierra todo el esfuerzo. Un triple a falta de 7 segundos para el final apretó las cosas, además los locales perdieron el balón y concedieron una posesión más a los alaveses que no supieron aprovechar. 17-28 para los visitantes, también poca recompensa cuando te han pegado un repaso cojonudo.

76-72 para Iraurgi en una mañana de esas que te dejan buen sabor de boca, una mañana en la que el baloncesto de provincias se reivindica y deja su carta de presentación a los grandes.

No sólo en Bilbao, Donosti o Vitoria se hace baloncesto.

Menos mal.