SIEMPRE “COMPLICÁNDONOS” LA VIDA

Defiendo con orgullo que soy un “friki” en esto del basket. Sobre todo soy un enamorado de organizar cosas, aunque me generen demasiados dolores de cabeza durante su proceso. Pero como las actividades extras en la que he trabajado siempre han salido bien (en lo que al tema deportivo se refiere), pues como que uno tiene la CPU llena de buenos recuerdos.

Yo tengo un serio problema con el basket. Soy capaz de estar las 24 horas dándole vueltas a las cosas. Estoy casi convencido que incluso durmiendo estoy pensando en cómo haría esto…….cómo haría lo otro……que podríamos hacer con aquello……………. Además tengo capacidad de generar ilusión cuando me embarco en algún proyecto y los que “engaño” para que me ayuden acaban sintiéndose realmente importantes (aunque la actividad haya sido mediocre) por el trabajo desarrollado. Más “frikis” (que somos muchos aunque no lo parezca)

En Abaroa buscábamos hacer una actividad “impactante” Algo que fuera capaz de darnos un plus de seguimiento y además nos permitiera fomentar el basket femenino en Vitoria. Sugerí la posibilidad de que organizáramos un torneo para nuestras cadetes buscado un objetivo muy claro: TENDRÍAMOS QUE QUEDAR ÚLTIMAS. Ello significaría que los equipos invitados serían mejores que nosotros en todos los aspectos.

La festividad de San Prudencio (finales de abril) era una buena fecha para desarrollarlo. Las competiciones han concluido prácticamente y los mejores equipos están preparando los sectores del Campeonato de España. Si éramos capaces de” vender” bien nuestro producto podríamos contar con buenos equipos. Teniendo la fecha clara nos tocaba afrontar lo más complicado: montar un grupo de trabajo para organizar todo el evento y generar recursos económicos que nos permitieran un “coste cero”

Qué quieren que les diga, aunque nos joda reconocerlo los hombres somos unos “paletos” en capacidad de gestión y de organización. Las mujeres nos dan 20.000vueltas. Si a eso le sumamos ILUSIÓN…….pues está claro que el tema va a salir bien. Tan sólo hay que tener muy claros los objetivos y en Abaroa estaban nítidos.

Así surgió la primera Edición del Torneo San Prudencio. Ponce de Leon (Valladolid), Segle XXI (Cataluña), Stadium Casablanca (Zaragoza), Bera Bera (Donosti) y Calasanz (Santander) fueron los primeros participantes que aceptaron el reto de desplazarse a Vitoria a jugar un Torneo CADETE FEMENINO. Deportivamente el objetivo estaba logrado, ahora sólo nos quedaba currar y disfrutar.

El “sector financiero” del Abaroa trabajó a destajo buscando recursos económicos. Nos sorprendió gratamente el alto grado de sensibilidad de la gente para con el basket femenino y las aportaciones comenzaron a entrar. El “coste cero” no se acabó de conseguir pero nos quedamos muy, muy cerca. A nivel organizativo fuimos capaces de preveer todos los problemas que pudieran surgir (las mujeres son las únicas capaces de tener tanta perspectiva) y a pesar de los pequeños desajustes que siempre surgen el nivel de satisfacción fue altísimo en todos los aspectos. Sirva de ejemplo que las “Pucelanas” adquirieron el compromiso de venir SIEMPRE a nuestro Torneo si queríamos.

Los padres de nuestras jugadoras nos prestaron una ayuda valiosísima (por supuesto que se la solicitamos) Además asumieron y entendieron a la perfección su rol de “obreros” dentro de la organización. Tenían claro que el liderazgo debía corresponder al Departamento Técnico del club y trabajaron a destajo siempre con una sonrisa y prestándose voluntarios para todo. Siempre fue igual en las tres ediciones del Torneo San Prudencio que yo viví. Un sobresaliente para ellos.

Alba Torrens fue la jugadora más destacada de esta primera edición.Así nació mi experiencia en organización y desarrollo de torneos a nivel nacional. La cara de satisfacción de los participantes y el ambiente de baloncesto que se respira en estos eventos es increíble. Compensa todo el trabajo previo que hay que hacer y tengo claro que siempre lucharé por hacer este tipo de actividades esté donde esté.

Hay un recuerdo que siempre vendrá conmigo de aquella primera edición. 35 minutos después de finalizar el lunch que ofrecimos a las autoridades y patrocinadores las 20 personas que habíamos trabajado en el evento nos manteníamos en silencio en la sala anexa al Polideportivo de Iparralde. Destrozados, sin comer, con nuestros biorritmos por los suelos y sin decir nada.Pero todos teníamos una sonrisa en la boca.

He preparado un álbum de fotos de las tres ediciones que yo viví de aquel Torneo. Además os incluyo debajo el link donde podréis encontrar más información si lo deseáis.

http://www.cbabaroa.com/web/abaroa/torneo01.asp"